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Diva Criado
Viernes 10 de diciembre de 2021 - 12:00 PM

Ómicron, hoya de incertidumbres

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Tuve noticias de la nueva variante, cuando visitaba el Hospital Clínic de Barcelona, a mediados de noviembre. Charlando con una médica veterana, que además presta sus servicios en varios centros de salud, surgió el tema de Ómicron. Pregunté qué opinas. Respondió: “Honestamente sabemos poco, sabemos de casos al norte de Sudáfrica, pero que sepa en Europa, hasta ahora no”.

Mucha agua ha corrido bajo el puente de aquel día a esta fecha. Ómicron, que al parecer viene circulando desde antes, avanza rápido y tiene en jaque al mundo, ignorando opiniones científicas y mecanismos logrados hasta ahora.

Angelique Coetzee, presidenta de la Asociación Médica de Sudáfrica, decía en una entrevista en televisión, que el riesgo de infección parece más rápido, pero no más grave y que los hospitalizados no contaban con un esquema de vacunación completa o no se habían vacunado. La mayoría de pacientes que había atendido tenían tos leve, dolores musculares y de cabeza, sin perder el sentido del gusto y el olfato. ¿Qué opinará ahora?

Se sabe, que los científicos que vigilan el comportamiento y la evolución del nuevo virus, están inquietos. Sugieren una posibilidad alarmante, la evolución convergente, un fenómeno que hizo posible que dos especies diferentes desarrollaran características similares. Situación que no es descabellada, teniendo en cuenta que Ómicron presenta un alto número de mutaciones (32). Aseguran que será “la variante más resistente” a las defensas humanas.

Dos entrevistas recientes apuntan en dos direcciones: Ravi Gupta, profesor de microbiología de la Universidad de Cambridge, explicaba que las mutaciones existentes en la nueva variante eran preocupantes. En febrero de este año Gupta, logró comprobar en los primeros análisis que dos de las variantes (alfa y beta) ya detectadas en la variante Ómicron, incrementaban el potencial de contagio del virus y reducían la capacidad de los anticuerpos de reconocerla.

Por su parte, el director del Instituto de Genética del University College of London, aseguró que no se tienen datos epidemiológicos realmente sólidos con respecto a cuán contagiosa o grave es efectivamente. Observó que Ómicron, “debe ser observada y analizada. No hay razón para preocuparse exageradamente, a menos que la frecuencia de los contagios aumente en un futuro cercano”.

Pero ese futuro cercano ya está aquí, los contagios con Ómicron se incrementan a pasos agigantados y las estadísticas suben sin tregua en Europa y en otros países del mundo. Las hospitalizaciones de los no vacunados y algunos (personas vulnerables) con dosis completas, comienzan a llenar los hospitales y las UCIS.

Está claro que la incertidumbre ante el nuevo reto, no da otra opción que recurrir a lo aprendido, pero es necesario impulsar el acceso global a las vacunas de los países pobres. Mientras haya personas dando vueltas por ahí, sin acceso a ellas o que no quieran vacunarse, con la libre circulación de personas el virus seguirá mutando.

Solo nos queda esperar, que las investigaciones soportadas en la ciencia proporcionen herramientas que permitan actuar con rapidez y atenúen el pánico que está generando Ómicron.

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