miércoles 03 de mayo de 2023 - 12:00 AM

Corriendo la cerca

En su libro El Mundo de Ayer el escritor Stefan Sweig relata cómo los nazis fueron introduciendo poco a poco el nacionalsocialismo en Alemania con su técnica de engaños, aplicando medidas restrictivas en pequeñas dosis para observar la reacción de la gente que, en general, actuaba con indiferencia porque sentían que “no era con ellos”. Hitler se guardaba muy bien de no mostrar el radicalismo de sus objetivos. Esperaba la reacción de otros países para comprobar si había sido muy fuerte la dosis, pero Europa no reaccionó porque sucedía “al otro lado de la frontera”. Las dosis fueron haciéndose cada vez más fuertes hasta que toda Europa cayó. La estrategia fue aplicar pequeñas dosis de autoritarismo y luego tantear el terreno e ir aumentando la presión sobre una Europa que se iba debilitando moral y militarmente. Les fueron corriendo la cerca y cuando se dieron cuenta, era muy tarde.

Leyendo a Sweig, cabe la pregunta: ¿El presidente Petro está midiendo cómo correr la cerca cuando propone acciones que invaden fueros que corresponden a otros poderes o a instituciones independientes como el Banco de la República, la Fiscalía, el Congreso, las cortes, o cuando ataca a medios de comunicación y empresarios? Está aumentando su dosis de autoritarismo cuando de manera audaz e intempestiva despide la mitad de sus ministros, incluyendo los experimentados de Hacienda y Agricultura que llamaban al presidente y a sus colegas a actuar con responsabilidad y mesura y se rodea de personas que se identifican con su ideología?

Su incendiario discurso del 1º de mayo agudiza la polarización y la lucha de clases. Algunos dicen que una cosa es lo que Petro diga y otra lo que en verdad haga. Lo preocupante es que el gobierno tiene todo el poder para actuar dentro del marco constitucional y simultáneamente irle socavando la capacidad de reacción a la población, hasta el punto no retorno.

Vale recordarle a Gustavo Petro que él es el presidente legítimo de TODOS los colombianos, no sólo de 20 % de los colombianos que lo eligieron. Tiene la obligación de jugar con las reglas de la democracia y defender la Constitución que juró respetar.

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Este artículo obedece a la opinión del columnista. Vanguardia no responde por los puntos de vista que allí­ se expresen.
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