Pero esto está íntimamente relacionado con dos elementos básicos: la productividad y la competitividad como lo explica el reconocido economista Jeffrey Sachs en su libro 'El fin de la pobreza' en donde habla de los cinco capitales indispensables: *Capital Humano basado en acceso a la educación de buena calidad, planes de salud universales con énfasis en la prevención y a condiciones de nutrición adecuadas para garantizar el desarrollo físico y mental de las personas.

*Capital Natural para un hábitat sostenible. Con el problema del milenio que es el Cambio Climático, adoptando las medidas para su litigación y adaptación, conservándose los ecosistemas, especialmente los bosques y los páramos para la 'cosecha del agua' el oro azul del Siglo XXI, todo relacionado con la protección de la biodiversidad, la gran ventaja comparativa del país en el contexto mundial.

*Capital Empresarial expresado en la adecuada integración entre la maquinaria y equipos y el capital de trabajo necesario para las innovaciones tecnológicas indispensables.

*Capital de Infraestructura Física representada en vías de transporte terrestre, férrea, fluvial, aérea y marítima, que faciliten la movilidad de bienes y personas al menor costo y tiempo posible; súmese otro aspecto vital: suficiente oferta de conectividad con las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones-TIC- y buenos servicios públicos de agua, aseo, energía eléctrica y gas.

'Capital Intelectual para la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación.

* Capital Público Institucional fuerte para la seguridad jurídica, con normas estables de regulación y control que aseguren la confianza inversionista, ataquen todas las formas de corrupción y generen entornos éticos y de transparencia en la sociedad, con un sistema judicial rápido y efectivo.

El control al crecimiento demográfico, del que poco hablan los políticos es un requisito vital para el desarrollo; así la torta del crecimiento alcanzará para una mayor equidad social, como ocurre en Canadá.