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Gustavo Galvis Hernández
Lunes 28 de diciembre de 2020 - 12:00 PM

Bomberos: a prevenir incendios

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La ausencia de lluvias con las graves consecuencias que ello implica, como la escasez de agua en numerosos municipios y en el sector rural, debe prender las alarmas especialmente en lo relacionado con los incendios que se puedan presentar, la mayoría de las veces por acción de pirómanos amparados por la impunidad, o las acciones y descuidos de las personas que no miden las consecuencias fatales de las fogatas, colillas, quemas, pólvora, ect.

En este contexto, es fundamental la gestión efectiva de los cuerpos de bomberos. En el caso de Bucaramanga y los demás municipios donde existen, es lógico que aumenten sus sistemas de alerta temprana como lo han demostrado durante muchos años con respuestas efectivas a las numerosas emergencias, arriesgando su seguridad con entrega, altruismo y responsabilidad.

Todo implica para estos meses secos la urgencia de reactivar las estrategias que eviten los incendios que potencialmente puedan ocurrir en los bosques del entorno de los municipios del Área Metropolitana incluyendo los de sus cañadas, todos de gran importancia porque oxigenan unas urbes con su aire contaminado, reverdecen un entorno urbano con árboles cada día más escasos y agredidos -podas extremas por ejemplo- y con pocos dolientes.

Es mejor prevenir el incendio que apagarlo. Como lo hacen en otros países avanzados en este tema, se deben organizar brigadas recorriendo los entornos de las áreas boscosas, en equipo con la CDMB y desde luego con la colaboración de la Policía Nacional y los voluntarios de los diferentes barrios. Un punto clave es poner vigías en sitios claves, que con binóculos por ejemplo, estén monitoreando cualquier salida o señal de humo para dar la alarma correspondiente y actuar con prontitud. Y hablando de incendios, están los causados por la quema pólvora o voladores, que además estresan con el ruido, contaminan el aire y torturan e infartan a los animales. Son acciones irresponsables violatorias de la ley- Código de Policía- que pueden destruir bosques invaluables por su importancia paisajística, ambiental, económica y social. Hecha la ley, hecha la trampa.

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