Según el Servicio Meteorológico Nacional de Francia: “El año 2020 ha sido el más caluroso registrado en Francia desde el inicio de las mediciones en el año 1900 (Franceinfo, 29/12/2020)”. En Estados Unidos, una nota de The Washington Post (3/12/ 2020) se titula: “Se avecina una catástrofe climática. Biden aún puede marcar la diferencia”. Joe Biden, el recién elegido presidente, ha dicho que marcará la diferencia con el lunático de Donald Trump, que abandonó los acuerdos climáticos de París del 2015. En esta nota se reproduce una intervención del Secretario General de las Naciones Unidas quien “sonó apocalíptico el miércoles en un discurso en la Universidad de Columbia”. El Secretario señaló: “El estado del planeta está roto”. “La humanidad está librando una guerra contra la naturaleza. Esto es suicida”.
El informe preliminar “Estado del clima global 2020” (19/12/2020) de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) advierte que “Las concentraciones de los principales gases de efecto invernadero, CO2, CH4 y N2O, continuaron aumentando en 2019 y 2020”. Estos son gases asociados al calentamiento global y emitidos -entre otros- por el uso de combustibles fósiles. La OMM señala: “La temperatura media global en 2020 va camino a que este sea uno de los tres años más cálidos registrados. Es probable que los últimos seis años sean los más cálidos registrados”. “Recientemente el nivel del mar ha aumentado a un nivel más alto debido -en parte- al mayor derretimiento de las capas de hielo en Groenlandia y la Antártida”. Este aumento del nivel del mar afecta islas y ciudades costeras como Cartagena; donde son visibles sus efectos como desaparición de playas y crecientes inundaciones en la ciudad.
En la Cumbre de Ambición Climática (12/12/2020), que conmemoró el quinto aniversario del Acuerdo de París, el presidente Iván Duque “anunció una meta de reducción del 51% de las emisiones de gases de efecto invernadero para el 2030” y que profundizará “la lucha contra la deforestación”. Sin embargo, el gobierno ya aprobó los proyectos piloto de fracking. El fracking es considerado una fuente importante de emisión de gases de invernadero. Para completar, la deforestación, que también incide en el cambio climático, registra cifras preocupantes en Colombia. El gobierno anuncia metas ambientales, pero sus acciones no parecen guardar coherencia con los resultados esperados.
