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Sergio Arenas
Domingo 29 de agosto de 2021 - 12:00 PM

Distrito Metropolitano II

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Continuando con la columna de la semana pasada, es el momento del Distrito Metropolitano.

Inicialmente se podría pensar que el Distrito Metropolitano involucra solo a los municipios del área, pero no es así. Comprender que Lebrija, Los Santos y Rionegro también hacen parte del área metropolitana es fundamental debido a su influencia económica y social.

El Distrito Metropolitano conformado por Bucaramanga, Floridablanca, Girón, Piedecuesta, Lebrija, Los Santos y Rionegro, traería significativos beneficios como: superar la desarticulación administrativa de los municipios, mejorar la planeación urbana, económica y social, mejorar la calidad de vida de los habitantes al optimizar la prestación de los servicios públicos y de planes de vivienda de interés social, el mejoramiento de la competitividad territorial, del modelo político administrativo, de la infraestructura regional y local, mayor capacidad para gestionar los recursos a nivel nacional, mejoramiento en la capacidad de endeudamiento y mayor liquidez para la ejecución de los proyectos con impacto.

Este Distrito clasificaría en categoría Especial según la jerarquización contenida en la Ley 617 de 2000, por lo tanto, el valor máximo de los gastos de funcionamiento no podría superar el 50% como proporción de su ingresos corrientes de libre destinación, lo cual implicaría mayor capital para inversiones.

Con el Distrito Metropolitano se reduciría la burocracia y por ende la carga del aparato territorial en virtud de la existencia de una sola alcaldía, un solo concejo, una personería y una contraloría; adicionalmente la unificación de institutos descentralizados por sectores.

Igualmente tendríamos derecho a solicitar que los dineros recaudados en el territorio distrital por el departamento, por concepto de impuestos, tasas y contribuciones sean invertidos preferencialmente.

Adicionalmente, tendríamos la facultad de suscribir directamente, convenios o contratos plan, permitiendo mayores inversiones públicas con recursos de la Nación en el nuevo ente territorial.

Lograremos convertirnos en Distrito Metropolitano si así lo aprueban en consulta popular los ciudadanos residentes en dicha área por mayoría de votos en cada uno de los municipios que la conforman, y siempre que participen en las mismas, al menos la cuarta parte de los ciudadanos inscritos en el censo electoral.

Es el mejor momento para continuar insistiendo en la viabilidad del Distrito Metropolitano. Pensemos en el nombre: Soto Norte Distrito Metropolitano.

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