En situaciones extremas, como las que estamos viviendo, muchos jóvenes dan lo de mejor de ellos para darles una mano a los más necesitados. Bucaramanga está llena de varios líderes juveniles que asumieron el reto de ayudar a la población vulnerable como un sano propósito de fe y de vida
Muchos de ellos se están organizando para cuidar a los ancianos, a los habitantes de calle y en general a los hogares más pobres, tocando las puertas de los corazones de las personas de buen corazón y hasta preparando almuerzos nutritivos para saciar el hambre que afecta a tantos.
A través de las redes sociales, nuestros jóvenes se las ingenian para lanzar al ciberespacio ideas artísticas, culturales y sociales. Con ellas no sólo amenizan el paso de nuestros días, sino que también promueven la acción más importante en esta lucha contra el COVID-19, que no es otra cosa que la vacuna más efectiva: la solidaridad con nuestros semejantes.
Uno de esos líderes es Andrés Niño, joven artista, publicista y altruista. Aunque él se define como un tipo 'común y corriente', su espíritu de Dios lo ha embriagado de una voz prodigiosa e incluso de mensajes que llegan al corazón y alivian a muchos bumangueses que hoy están abatidos por las duras pruebas que nos ha traído el coronavirus.
En el Podcast de nuestros 'Vitamínicos Espirituales', de Vanguardia.com, él nos habla de su propósito de vida, de cómo se llenó de fe ante la pandemia y sobre todo nos da consejos sobre lo que vendrá después de esta fuerte crisis. Los invito a escuchar sus grandes enseñanzas.