Terminal de Bucaramanga tendría la culpa por fallas en diseños de su Estación

Terpel le salió al paso a las declaraciones dadas por Wilson Mora, gerente suspendido de la Terminal de Transportes a diferentes medios de comunicación, en las que señaló a la distribuidora de combustibles de ser la responsable en los errores de diseños estructurales para la construcción de la estación de servicios que se ejecuta en la Terminal.

En una comunicación dirigida al propio Wilson Cadena, la empresa responsabilizó al hoy Concejal por el Partido Liberal de omitir las recomendaciones para ajustar los diseños a sus especificaciones.

“Terpel fue absolutamente claro en indicar específicamente el requerimiento de construcción de unas losas cuyas resistencisa debían ser de 52 toneladas”, se lee en un aparte de la carta que envió la empresa.

Las pruebas

Dentro de la comunicación Terpel anexa copia de dos correos electrónicos enviados a la Terminal, uno en julio y otro en noviembre, para evidenciar su inconformismo con el diseño estructural, el cual no cumplía con sus especificaciones.

“Hemos analizado las posibles consecuencias del cambio propuesto por ustedes y consideramos que el nivel de riesgo que representa para la estabilidad de la obra es inaceptable para Terpel, consideramos que el diseño debe realizarse de acuerdo a nuestra solicitud de carga móvil de 52 toneladas comunicada a ustedes”, dicta uno de los correos.

Incluso, la compañía adjunta el correo enviado por uno de los ingenieros de la Terminal en el que le proponen a Terpel modificar los diseños estructurales de la estación de servicios de tal forma que los camiones cisterna no ingresen hasta la bomba.

De esta forma, según el Ingeniero, se evitaría que se tuvieran que diseñar estructuras para resistir 52 toneladas de peso, situación que convertiría el proyecto “más amigable presupuestalmente para la Terminal”.

Las consecuencias

Debido a los errores en el diseño estructural de la estación de servicios, la interventoría de la obra, JG Serving, a cargo de Javier Gómez, quien entre otras cosas pagó con su tarjeta de crédito algunas de las facturas de las 1.500 líneas telefónicas a nombre de la Terminal que el suspendido gerente reportó como robadas, en el mes de octubre manifestó su preocupación frente a los diseños estructurales y la necesidad de revisarlos, hacerles ajustes, correcciones y mejoras.

Dichos ajustes de los diseños requerirían una adición presupuestal de por lo menos $500 millones, la misma cantidad que el propio Wilson Mora en la junta de la entidad el 16 de diciembre reconoció que había adicionado sin el consentimiento de la mesa directiva, por lo cual pidió disculpas.

Ahora el propio Mora niega haber realizado dicha adición.

Además de las adiciones presupuestales, la construcción de la estación de servicios también ha requerido extendiones en tiempo, ya que según el contrato de la obra los trabajos se terminarían en4 meses y ya tienen 7 meses de retraso. Terpel tiene un asiento en la junta directiva de la Terminal con voz y voto para las decisiones de la entidad..

Obras suspendida

Además de los errores en los diseños, Terpel señala a la Terminal, representada por Wilson Mora, como la responsable por la suspensión de la obra por no contar con los permisos de construcción de la Curaduría Urbana, tal como lo denunció en su momento Vanguardia Liberal.

“Frente al sellamiento efectuado en la obra de construcción de las losas por ejecutarse sin los permisos ni autorizaciones correspondientes, es importante resaltar que de acuerdo con la cláusula tercera de promesa de usufructo celebrado entre la Terminal y Terpel, se acordó que el responsable de construir dicha losa, (evidentemente con el lleno de los requisitos legales), estaba encabezada por la Terminal”, se lee en otro aparte.