Las familias del corregimiento Meseta de San Rafael, en Barrancabermeja, así como El Centro, siguen sacando provecho a la experiencia que por año les ha dado las labores del campo.
Y es que durante esta pandemia no se han quedado de brazos cruzados y por el contrario, de la mano de la Umata, se han propuesto reforzar cada uno de los proyectos que se adelantan en la zona, que pretenden aliviar en parte lo generado por la crisis.
Alexander Luna, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda La Unión, señala que este proceso le ha permitido a su comunidad seguir con la frente en alto y aprender a sacarle provecho a los malos tiempos.
Es por ello que resaltó el trabajo piscícola que continúan cristalizando 24 familias, con la entrega oficial de unidades productivas en el marco del programa de seguridad alimentaria nutricional rural.
“... Es significativo que nos tengan en cuenta para estas entregas de las unidades básicas familiares. Significa desarrollo y significa sostenimiento en los hogares”, indicó el líder de la vereda La Unión.
La entrega de las unidades productivas se distribuyó también hacia las comunidades de Rancho J5 y Peroles, así como El Centro y el Llanito, donde se entregaron 36.000 alevinos.
Según explicó el director de la Umata, Cristian Ramírez, se ha hecho un esfuerzo importante por llegar a cada uno de los productores, con programas como el mercado campesino virtual, los programas de inseminación artificial y mecanización de tierras, así como estrategias de acompañamiento constante al sector agropecuario.
“Les estamos haciendo entrega de alevinos de cachama, alevinos de bocachico y su respectivo concentrado, esto con la idea de que empecemos a asegurar la nutrición en el corregimiento, pero además se entrega como plan semilla”, dijo el funcionario.