La comunidad aledaña a la ciénaga Paredes, en especial las asociaciones de Pescadores, se mostraron muy preocupadas por lo que viene ocurriendo en dicho espejo de agua, donde este año han muerto ya tres manatíes.
Pese a que la Corporación Autónoma de Santander lideró una comisión de expertos que ha venido manejando tales casos, el último de los cuales ocurrió esta semana, los lugareños afirman que aún no hay una verdad concluyente acerca de las causas por las que sus mamíferos consentidos se están muriendo.
“Es preocupante, realmente no esperábamos este golpe porque el manatí es lo más valioso que tenemos en la ciénaga y somos conscientes de la importancia de conservar esta especie. Es preocupante además porque no sabemos qué pasa dentro del ecosistema”, dijo Víctor Manuel Durán, representante de Asopromanatí.
Entretanto, el director de la CAS, Alexcevith Acosta, entregó detalles de los resultados preliminares de la necropsia que se hizo esta semana, a la vez que recalcó en que el uso de redes ilegales para la pesca estaría cobrando un alto precio.
“La necropsia arrojó un resultado que realmente nos preocupa, ya que en el estómago del manatí no había alimento. Esto quiere decir que les está quedando difícil el acceso al mismo.
Esto puede por causa del uso del trasmallo en la ciénaga. Los mamíferos no están alcanzando a llegar al sitio donde está el alimento, tras quedar enredados o en un estado de estrés”, indicó el funcionario.
Por último, Acosta advirtió que hay otras situaciones que también están siendo objeto de estudio.
“Se le tomaron muestras al tejido del manatí para ser analizadas en laboratorio y poder identificar más a fondo lo que pudo haber ocasionado su muerte.
De igual forma se tomaron unas muestras de agua para poder caracterizarlas en un laboratorio acreditado y de esta forma informarle a la comunidad lo que está sucediendo en esta zona”, puntualizó.
