Los cultivadores del Carare sufren con bloqueo vial

Los estragos por la inclemente temporada invernal en varios municipios de la región son más que evidentes.

Hace solo un par de semanas comunidades de Sabana de Torres y Puerto Wilches dieron a conocer su preocupación por la intensidad de las lluvias y las pérdidas de cultivos de plátano y palma de aceite que este fenómeno había ocasionado y ahora son los cultivadores de fruta de municipios del Carare, quienes viven su propio drama.

Y es que el deslizamiento de tierra que desde el pasado martes mantiene cerrada la Troncal del Carare, entre Cimitarra y Landázuri, ha puesto en jaque la producción de mora de esa zona y las quejas de los cultivadores no se han hecho esperar.

Si bien, el bloqueo que tiene como punto de referencia la vereda Kilómetro 6, lo origina la caída de al menos 3.000 metros cúbicos de tierra, los agricultores señalan que las tareas de limpieza han sido lentas.

Mediante un video que circuló en redes sociales ayer, no solo dieron a conocer su descontento, sino que hicieron evidente la pérdida de varias toneladas de mora, que no pudieron ser sacadas de la zona debido, precisamente, al bloqueo vial.

“Estamos desde el municipio de Bolívar, Santander, donde desafortunadamente por la lentitud de los trabajos de la vía a Landázuri se nos dañaron más de nueve toneladas de mora, la cual tenemos que vernos en la obligación de botarla.

No la recibieron en el punto donde se tenía previsto para agroindustria”, señaló uno de los cultivadores del municipio de Bolívar, en el momento justo en que vacía, junto a otros hombres, cientos de canastas con el fruto.

Cabe recordar que la vía que hasta ayer en la tarde se mantenía bloqueada comunica a Vélez con la región del Carare - Opón y conecta a la Troncal Central con la Troncal del Magdalena Medio.

Trabajos complejos

A pesar de que el Invías hasta ayer no emitía una información oficial acerca de los avances en los trabajos de despeje de la Troncal del Carare, en jurisdicción de Cimitarra, se pudo conocer que la intensidad de las lluvias en la zona ha impedido que los trabajos vayan tan rápido como se esperaba.

De hecho, ayer se completaban 48 horas de labores, pero no había aún luz verde para el paso en doble sentido y se conoció de manera extraoficial, que en las próximas horas podría darse a un solo carril.

Lo cierto es que el deslizamiento ocurrido el pasado lunes, que por fortuna no dejó pérdidas humanas, ayer mantenía a cientos de conductores, en su mayoría transportadores de carga pesada, apostados en la vía a la espera de que se autorice el paso entre los municipios de la región del Carare - Opón, en Santander.