Un equipo técnico de la CAS y ambientalistas visitaron ayer Ciénaga de Paredes, donde se realizó la necropsia de un manatí hallado muerto el lunes y se analizaron posibles causas de este caso y otros dos más ocurridos en 2020.
Indignación e impotencia reinan entre la comunidad aledaña a la Ciénaga de Paredes por lo que significa el hallazgo de un manatí muerto en este espejo de agua, que eleva a tres el número de casos de igual naturaleza este año.
Las causas de la situación evidenciada esta semana aún son desconocidas, al igual que ocurrió en los meses de abril y mayo, cuando fueron hallados los otros dos mamíferos de esta especie en vías de extinción.
Fueron pescadores del corregimiento Campo Duro, en Puerto Wilches, quienes dieron aviso a la autoridad ambiental, sin embargo, alegan que no hay contundencia en los resultados de las investigaciones, ya que aún no se sabe qué es en realidad lo que está matando a los manatíes.
De hecho, versiones suministradas por funcionarios de la CAS en el mes de mayo indicaban que muy seguramente redes ilegales habrían sido la causa de las muertes en ese entonces, sin embargo, tal como ocurrió aquella vez, el tema sobre la contaminación del agua vuelve a estar sobre la mesa para su análisis.
Lo cierto es que una comisión de la Corporación Autónoma de Santander llegó ayer hasta la zona y se encargó tanto de la necropsia del manatí antillano, así como de recoger nuevas muestras de agua y dar charlas de sensibilización a las comunidades aledañas.
“Como autoridad ambiental nos preocupa esta situación, y por ello empezamos a barajar varias hipótesis. El uso del trasmallo sigue afectando la convivencia del manatí en la ciénaga porque evita al manatí llegar a buscar su alimento natural.
Asimismo, hemos hecho caracterización de agua. La más reciente fue en mayo, cuando nos arrojó parámetros normales, aunque hay que decir que hay presencia de algunos elementos ferrosos, por todo el uso de plaguicidas e insecticidas que se usan en la zona, lo cual es necesario también empezar a intervenir”, señaló el director de la CAS, Alexcevith Acosta.
Apoyo de la Policía
Según explicó la CAS, el trabajo ahora en adelante obliga a ir de la mano con la comunidad, pero también de la Policía, para vigilar más de cerca la situación en Ciénaga de Paredes.
“Junto con Cabildo Verde y las comunidades trabajamos en el caso, en el que también participarán expertos de otras ciudades para poder generar un informe que nos permita intervenir rápidamente para evitar esta situación.
Por ahora, pediremos el apoyo a la Policía y la Fiscalía para hacer un trabajo conjunto de capacitación y sensibilización para evitar el uso del trasmallo y a nuestros agricultores para que sigan reduciendo el uso de plaguicidas e insecticidas que terminen contaminando los espejos hídricos”, puntualizó Acosta.
