“En total peligro”. Así señaló la docente Martha Liliana Argüello Pereira la situación a la que se enfrentan los estudiantes de la Escuela Comuneros, Sede del Colegio Universitario del Socorro, CUS. Según Argüello, el invierno ha empeorado las condiciones de la planta física.
“Esto no es nuevo. Es algo que hemos venido evidenciando desde años anteriores. Pero este 2019 a causa de tanto invierno y aguaceros muy fuertes el daño se ha hecho más evidente y más latente a ocasionar una tragedia. Tenemos paredes y columnas agrietadas; los techos prácticamente dañados. Ya la Secretaría de Salud vino a inspeccionar, nos dio recomendaciones y si no se cumplen, posiblemente sellen la escuela”, dijo a Vanguardia la docente.
El plazo está establecido hasta el 15 de septiembre. A la fecha aún no han recibido visita por parte de la Administración Municipal. Señaló que pasaron un oficio desde el pasado 28 de agosto firmado por directivos, docentes y padres de familia, para que autoridades municipales intervinieran la escuela y así evitar su cierre.
“Hay demasiada humedad y esto está ocasionando alergias. Tenemos mucho mobiliario dañado y no lo reconocen. Por otro lado tenemos equipos dañados y necesitamos trabajar de forma óptima con los niños”.