Durante 15 horas ininterrumpidas voluntarios de la Cruz Roja Seccional Santander trabajaron en el traslado de una adulta mayor con un cuadro de insuficiencia respiratoria, que requería atención médica en un centro hospitalario. Debían llevarla de zona rural del municipio de Cáchira al Hospital Emiro Cañizares de Ocaña.
En una carrera por salvarle la vida a una adulta mayor con insuficiencia respiratoria se convirtió el operativo que la Cruz Roja seccional Santander adelantó este fin de semana en zona rural del municipio de Cáchira, en Norte de Santander.
La señora no tenía los medios para poder desplazarse a la institución de salud para recibir la atención especializada.
Pese a que la ubicación de la paciente era Norte de Santander, era más rápido y efectivo realizar la operación desde Bucaramanga.
En la operación participaron de forma coordinada la Sede Nacional, la Seccional Norte de Santander y Santander de la Cruz Roja, esta última facilitó el recurso humano, técnico y logístico para llevar a cabo el traslado.
En dos vehículos de la Cruz Roja, nueve personas entre voluntarios y empleados de la institución partieron desde Bucaramanga hasta el municipio de Cáchira. Una vez allí, tras siete horas de recorrido, continuaron la ruta por caminos de herradura y montañas a pie. Después de dos horas lograron llegar a la vivienda de la mujer que requería ayuda.
Pese a que el equipo de voluntarios ya se encontraba en el lugar, la travesía aún no había terminado. Aún faltaba superar la prueba más delicada: mantener estable a la paciente, superar la adversidad del clima, el cansancio y la topografía. El traslado de la mujer se hizo de noche y en una camilla manual.
Finalmente, después de casi seis horas de recorrido, los voluntarios de la Cruz Roja llegaron al punto de encuentro, en donde los esperaba una ambulancia del Hospital de Ocaña. Personal médico recibió a la paciente y continuó su traslado al centro asistencial.
"Destacamos que esta labor se enmarca dentro del compromiso de la labor humanitaria de la Cruz Roja por preservar la vida, sin ningún tipo de distinción. Adicionalmente reconocemos el valor, altruismo y profesionalismo de nuestros voluntarios y empleados quienes lograron superar todas las adversidades para cumplir con aquel lema que enmarca la acción de la institución: “Prevenir y aliviar el sufrimiento humano”, indicaron voceros de la Cruz Roja en Santander.
