¿Te dejarías conquistar por un 'copete'? Descubre los secretos y sabores de este delicioso postre santandereano


Recorriendo pueblos santandereanos descubrimos que este departamento sabe a tradición, las deliciosas preparaciones de los abuelos se han unido para darle vida a este postre, que se sirve en varios municipios de la Provincia de Vélez. Y si usted decide hacer una visita por estas tierras santandereanas, va a encontrar desde el copete bolivarense hasta el copete veleño. Y si pasa por Puente Nacional, Barbosa, La Paz, Guavatá, Cite, El Peñón o Chipatá, sus habitantes lo van a cautivar con estos deliciosos sabores.
La centenaria tradición de los dulces nos sumerge en la memoria de los abuelos.
A través de don Ramiro Olarte Bareño, maestro de coplas y guardián de las tradiciones veleñas, conocimos la historia de cómo sus abuelos hacían bocados dulces, una especie de mermeladas a partir de frutas como la mora, la guayaba y el durazno, para luego producir esa mezcla exquisita que trasciende generaciones, como lo asegura don Ramiro de 64 años, recordando conversaciones con su abuelo a los 85, donde los manjares y los sabores eran el centro de las reuniones familiares.

Liliam Vásquez Téllez, más conocida como la Chata y declarada como Patrimonio Cultural Vivo de Santander por la Unesco y la Asamblea Departamental en 2019, nos contó un recuerdo de su niñez en Bolívar, cuando su madre visitaba a una de sus amigas y eran recibidas con dulces de plato (así se llamaba el ‘copete’ en esa época) y era presentado con elegancia en platos de loza fina.
Cuenta además que en Cite, esta tradición culinaria encontró hogar luego de la exposición de orquídeas porque vieron en esta combinación de dulces, un potencial para complacer a los visitantes de este corregimiento de Barbosa muy visitado precisamente por encontrar un 'copete' delicioso.
Le puede interesar: Tres sopas colombianas entraron en el listado de las 50 más deliciosas del mundo
En este viaje gastronómico por Santander, Vanguardia localizó a doña Rosa Cadena, una de las pioneras del copete en Vélez y prueba de ello, fue el premio que recibió en el concurso 'Los Fogones de mis Nonos', organizado por la Gobernación de Santander, donde conquistó el paladar de los exigentes jueces que hicieron parte del evento, eligiendo la mejor receta municipal.
Doña Rosa también nos contó que la idea de preparar este delicioso pasabocas, nació por herencia familiar y su deseo por continuar con esta tradición. Esto la llevó a convertirse en una de las mejores, por eso en casa de sus padres en Vélez, aprendió con la mayor dedicación a hacer un arequipe artesanal en una paila durante unas cinco horas, los dulces de mora, papayuela y la preparación de las brevas, le ocupan unas dos horas, mientras que los acompañantes, como la mantecada y el amasijo, requieren de una hora de su tiempo. Finalmente, el infaltable queso, ya lo compra preparado.
También: Bocadillo con queso: ¿cuál es el origen de esta tradicional combinación?
Justo en nuestra conversación con doña Rosa, apareció Walter Osorio, un visitante paisa que se deleitó con el mágico sabor del 'copete', nos contó su fascinación por el dulce y nos compartió con entusiasmo su intención de llevar consigo los ingredientes a su tierra, para repetir la experiencia de ese manjar veleño en la comodidad de su hogar.