Así es el nuevo hogar de los leones ‘bumangueses’ en Sudáfrica
El Santuario del gato grande Emoya, está ubicado en una finca privada en Vaalwater en el extremo sur de la Reserva de la Biosfera de Waterberg, a 247 kilómetros de Johannesburgo. Para llegar al lugar, son necesarias tres horas de viaje partiendo desde la capital Sudafricana.
Fue inaugurado por Savannah Heuser, una de las propietarias, en 2012. El primer león que llegó a Emoya fue Channel, rescatado de El Cairo en 2013. Con la llegada de los 33 leones rescatados de Colombia y Perú, el santuario alberga en total a 39 leones y dos tigres. (Lea cómo fue el operativo de salida de los leones hacía Sudáfrica)
El paraje natural posee 5.000 hectáreas que se destacan por una mezcla asombrosa de hábitats. En el Santuario del gato grande Emoya, se pueden encontrar regiones montañosas, praderas ondulantes, bosques, cuevas de los acantilados y gargantas de ríos.
La región, además de poseer el clima ideal para la buena calidad de vida de los leones, también es el hogar de otras especies como búfalos, jirafas y rinocerontes blancos.
Por el momento, los 33 leones rescatados vivirán unos meses bajo la estricta supervisión veterinaria, mientras se adaptan al cambio. Además, los leones entrarán a un proceso de castración, pues allí existe una política estricta de no reproducción, sustentada en que estos leones han nacido producto de mezclas endogámicas (cruces dentro de las mismas familias). (Lea también: Los leones de Bucaramanga ya están en Sudáfrica)
Durante este tiempo y mientras se empiezan a configurar las nuevas manadas, los leones estarán separados, aunque con la posibilidad de verse y olerse.
La operación, bautizada "Espíritu de Libertad", que duró dos días de viaje, costó 10.000 dólares por león, el mismo precio que un pasaje en primera clase para un vuelo transatlántico.
Con la comitiva de la ONG Animal Defenders International (ADI), que gestionó y solventó toda la operación, llegó a Sudáfrica Deyanira Mateus, quien estuvo a cargo de los leones todo el tiempo. Ella ayudará a la rehabilitación de los felinos bumangueses en África.