Una silla caliente, así es el banco del Atlético Bucaramanga
Continúa el desfile de entrenadores en el Atlético Bucaramanga, una escuadra que desde el 2016, cuando regresó a la A, ha tenido seis entrenadores en propiedad y tres interinos.
Luego de la reciente caída 4-2 ante Medellín, que sentenció la eliminación a dos fechas del final de la primera ronda de la Liga Águila I de 2018, el club ‘Leopardo’ anunció mediante un comunicado de prensa que “el comité ejecutivo y el profesor Diego Cagna han llegado a un común acuerdo y se decide dar por finiquitado su cargo como director técnico del club Atlético Bucaramanga”.
El estratega argentino estuvo al frente del cuadro ‘amarillo’ en 17 juegos y apenas sumó 19 puntos, pero más allá de los resultados, el equipo demostró momentos de buen fútbol, pero los errores defensivos y la falta de efectividad en el frente de ataque, entre otros factores, lo privaron de una mejor ubicación en la tabla.
El lugar de Cagna será asumido por el santandereano Adolfo León Holguín, quien estará como director técnico encargado.
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“Asumo de forma interina por los dos partidos que faltan y vamos a tratar de que el equipo termine bien. No vengo a terminar por terminar, yo también tengo mis objetivos y quiero que todo salga bien”, dijo Holguín, quien en 1998 también estuvo a cargo del Atlético, con destacados resultados.
¿Debía irse?
En redes sociales, los seguidores del Atlético Bucaramanga y la prensa deportivo, en su mayoría, mostraron su inconformismo con la salida del entrenador Diego Cagna. Para muchos, la falta de continuidad en los procesos es la principal causa del mal momento del equipo ‘amarillo’.
Para Elías Correa, exjugador del cuadro búcaro entre los 80 y 90, “la salida era algo anunciado, pero tiene su lado negativo. Anunciado, porque él llegó a dirigir por primera vez a Colombia y no conocía nada y es difícil tomar un equipo así y más a un Bucaramanga que venía de salvar el descenso en el último minuto. Y negativo, porque otra vez se debe empezar de cero, con otro entrenador, que necesitará tiempo para encontrar el equipo y ponerlo a funcionar bien”.
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Entre tanto, Germán Wandurraga, entrenador de la selección Santander juvenil, considera que “el problema no es de cuerpo técnico, sino de estructura, el problema es más dirigencial, en el sentido de que los equipos necesitan buen material humano para desarrollar una idea. Al Bucaramanga le ha faltado pensar más en grande y construir un mejor equipo. En este semestre las contrataciones no fueron las mejores, salvo la de los jugadores santandereanos”.
Algunos problemas del atlético bucaramanga
La continuidad de los entrenadores
La falta de una política seria de contratación.
Las divisiones menores no están estructuradas.
Carece de un patrimonio, pues tiene pocos jugadores propios y apuesta por los préstamos.
Además de los contantes cambios de entrenadores, sucede lo mismo con jugadores y directivos.