Entienda qué es eso del urbanismo táctico que se tomó sectores de Bucaramanga
Luego de la implementación del urbanismo táctico en la Calle de los Estudiantes, el antiguo ‘Tierrero' de la avenida Quebradaseca, y el más reciente, en la carrera 20 entre calles 33 y 36, la administración de Rodolfo Hernández ampliará este movimiento arquitectónico a más sectores de Bucaramanga.
Según el Gobierno Local, las siguientes zonas que se intervendrán serán la plazoleta de acceso al Colegio Inem, Café Madrid, Ciudad Bolívar, el corredor peatonal aledaño a los cinemas de Cabecera y Alameda de las Artes (zona cercana al parque de las Mejoras Públicas).
La medida consiste en reactivar espacios olvidados o con demasiado tráfico y así ampliar las zonas para el tránsito de los peatones.
Al respecto, el jefe de gobernanza, Manuel Azuero Figueroa, manifestó a Vanguardia.com que "estas obras representan una nueva manera de abordar los espacios públicos y las vías para recuperar de manera efectiva la ciudad y entregársela a los bumangueses. Queremos que caminar por los sectores más concurridos sea cada vez más seguro y agradable, por eso en pocos días se reivindica lo que se había perdido por años”.
Para la intervención de estos lugares se utilizó pintura, plantas y material reciclaje cuya instalación no supera los $60 millones de cuantía mínima legal vigente de contratación. En el caso de la carrera 20, donde se hicieron demarcaciones sobre el pavimento y se redujo el paso vehicular a un solo carril, el costo de la obra no superó los $4 millones.
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Desde la aplicación de esta idea, algunos bumangueses la han calificado como novedosa y favorable para el mejoramiento del tránsito. "Me parece una propuesta muy buena porque los carros ya no se parquean y los trancones se reducen. Creo que es una decisión acertada por parte de la Alcaldía", aseguró Germán Medina, habitante de Bucaramanga.
Sin embargo, otras personas consideran que esta medida es errada porque perjudica la movilidad y facilita que las calles se utilicen como zonas de parqueo de motocicletas y extensión de los locales comerciales. "Desde que habilitaron esos espacios para que la gente camine lo que hicieron los motociclistas fue parquear sin problema. Además, los dueños de los locales sacan sillas y utilizan la calle como parte de sus negocios", expresó Manuel Castillo, transeúnte.