martes 11 de octubre de 2022 - 1:40 PM

Dahmer, la polémica miniserie de Netflix, una de las más vistas de la plataforma

En febrero de 1992, Jeffrey Dahmer fue condenado a 15 cadenas perpetuas consecutivas (900 años de cárcel), pero sólo cumplió poco más de dos antes de que lo mataran.

La serie de Jeffrey Dahmer, el asesino que violaba y se comía a sus víctimas, es una de las más vistas en Netflix. Twitter / VANGUARDIA
Evan Peters (izq.) es el actor que se puso en la piel del asesino serial. Twitter / VANGUARDIA

Dahmer, la miniserie de Netflix sobre el controversial asesinó serial estadounidense, acumula 496 millones de horas de reproducción en sus primeras dos semanas, convirtiéndose en la serie original de la plataforma más vista en ese periodo de tiempo.

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La historia de Jeffrey Dahmer no se ha bajado del top de las producciones más vistas de la plataforma, sin embargo, algunas personas que estuvieron involucradas no están de acuerdo con la exitosa serie.

Lo cierto es que el enfoque que se toma para contar la vida y el raid criminal del “Carnicero de Milwaukee” provocó fuertes reacciones de las familias de las 17 víctimas.

Dahmer intentó transformar en zombies a sus víctimas para mantenerlas con él. Para eso, luego de emborracharlas o drogarlas, cuando estaban inconscientes, les inyectó ácido o agua hirviendo en el cerebro.

La miniserie, protagonizada por Evan Peters como Dahmer, es actualmente el programa número 1 de Netflix en más de 60 países.

Dahmer hace una cuidadosa reconstrucción de época, la dirección y las actuaciones, sobre todo la composición del “Carnicero de Milwaukee”, lograda por Peters, que construyó un personaje de gestos cortos y casi inexpresivos, pero a la vez tremendamente inquietantes.

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Llama la atención que el joven rubio, de mirada afable y hablar pausado, no encajaba de ninguna manera en los perfiles clásicos de los asesinos en serie.

A lo largo de 13 años, entre 1978 y 1991, Dahmer se había cobrado 17 víctimas, todos varones jóvenes, sin conformarse solamente con matarlos. No solo los emborrachaba o drogaba, las mataba casi siempre por estrangulamiento, violaba sus cuerpos muertos o se masturbaba sobre ellos, los desmembraba, separaba los huesos de la carne, cocinaba y se comía el corazón o algún churrasco que cortaba de los bíceps.