El exjefe del Clan del Golfo entra a engrosar la lista de latinoamericanos que pagan una pena en ese país.
El exjefe del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, quien fue extraditado a Estados Unidos en un repentino operativo en la tarde del miércoles 4 de mayo, entra a engrosar la lista de capos del narcotráfico latinoamericanos que terminan respondiendo ante la justicia de ese país.
Si bien Otoniel tiene cerca de 128 procesos abiertos en Colombia por un amplio catálogo de delitos como el tráfico de estupefacientes y asesinatos que datan desde hace más de una década, primero tendrá que resolver su expediente con la justicia estadounidense, que lo buscaba por el envío de drogas.
Dairo Antonio Úsuga llegará a la cárcel federal de Brooklyn, en Nueva York. Es tal su prontuario que el presidente Iván Duque lo comparó con Pablo Escobar porque “no solo se trata del narcotraficante más peligroso del mundo, sino de un asesino de líderes sociales, abusador de niños, niñas y adolescentes, asesino de policías y uno de los más peligrosos criminales del planeta”.
Otros de sus excompañeros de filas en el Clan del Golfo también terminaron en Estados Unidos, como Henry de Jesús López, alias Mi Sangre y Daniel Rendón, alias Don Mario.
Contra “Mi Sangre” pesa una condena de 31 años de cárcel y en los folios de Don Mario está escrita una pena de cadena perpetua, por la que tendrá que estar allí durante al menos 20 años.
Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40, quien dirigió el Bloque Norte de las AUC, fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, donde estuvo preso durante 12 años hasta su regreso a Colombia en septiembre de 2020. En el país se encuentra detenido.
Salvatore Mancuso Gómez, el máximo jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia, y de Diego Fernando Murillo Bejarano, alias don Berna, otro exnarcotraficante y exparamilitar, fueron presentados ante la justicia estadounidense en 2008, extraditados también por cargos relacionados con el tráfico de drogas.
En el catálogo de jefes del narcotráfico que pasan sus días en una prisión de Estados Unidos, la mayoría en centro de máxima seguridad de los estados de Nueva York o La Florida, también está el expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández, quien fue enviado a ese país en abril, apenas unas semanas después de dejar el cargo en el Ejecutivo.
Junto al político que gobernó la nación centroamericana durante dos periodos también está su hermano Tony Hernández, quien se desempeñó como diputado y fue condenado a cadena perpetua por facilitar el envío de drogas.
Esta lista se cierra con uno de los más buscados de los últimos años, el mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, quien ha sido el narcotraficante más polémico de ese país y uno de los más buscados por la DEA.
