En Paris, una mancha amarilla invadió las calles por donde pasó la última etapa del Tour de Francia.
Toda Colombia se paralizó para ver la hazaña del ciclista Egan Bernal. Mientras que en Paris, una mancha amarilla invadió las calles por donde pasó la última etapa del Tour de Francia 2019.
En Francia, la locura es tricolor. Antes del inicio de la última etapa, miles de colombianos le dieron la bienvenida a Egan, antes de que se enfundara en el maillot que lo define como líder.
Millones de colombianos también paralizaron sus actividades en la mañana de este sábado para seguir por televisión la penúltima etapa del Tour de Francia, en la que su compatriota Egan Bernal se proclamó virtual campeón de la carrera más importante del mundo por etapas.
En casas, restaurantes y centros comerciales la gente parecía congelada en el tiempo siguiendo el desarrollo de la etapa que terminó en Val Thorens, a 2.365 metros de altitud, y que consagra a Bernal de 22 años, como el primer latinoamericano en ganar el Tour, y uno de los más jóvenes de la historia.
Esta es una victoria con la que Colombia soñaba desde hace 35 años, cuando también en un mes de julio, el de 1984, “Lucho” Herrera se convirtió en el primer escarabajo en ganar una etapa del Tour, en un espectacular ascenso al Alpe d’Huez.
La victoria de Bernal se redondeó con el desempeño de los también colombianos Rigoberto Urán (EF Education First) y Nairo Quintana (Movistar), quienes ocupan la séptima y octava plazas respectivamente, y Nairo ganó además una etapa.
Colombia es el único país que en esta edición del Tour de Francia sitúa a tres de sus corredores entre los diez primeros de la general individual, algo también inédito para el país.
El “cuarto mosquetero”, Sergio Luis Henao (UAE Team Emirates), cumplió labores de gregario aunque se mostró en algunas etapas y quedó lejos de los primeros puestos.
Pese a que era sábado por la mañana el desempeño de Bernal y de los otros ciclistas hizo que la gente pusiera música para celebrar el triunfo del zipaquireño.
En las calles los conductores de vehículos hicieron sonar sus bocinas y ondearon banderas colombianas, las mismas que adornaron las entradas de varios centros comerciales.
Incluso en algunas universidades de Bogotá donde se imparten clases los sábados los alumnos tuvieron permiso para interrumpir la jornada de manera que pudieran ver la etapa decisiva, ganada por el italiano Vincenzo Nibali (Bahrain Mérida).
Pese a que todavía no se sabe la fecha del regreso al país del “niño maravilla” los colombianos ya piensan en cómo será la bienvenida que darán al campeón del Tour de France, título que debe confirmar este domingo en el paseo triunfal en París.
