COVID-19: Un virus ‘fuera de control’ en Perú, Chile y México
Primero Asia, luego Europa, ahora América. El coronavirus no da tregua en este continente, y especialmente en América Latina, donde registra cifras dramáticas de contagio y se mantiene con fuerza.
Cuatro países latinoamericanos figuran dentro del top 10 de los más afectados por la pandemia que entró en una “fase peligrosa” conforme avanza el desconfinamiento de los ciudadanos, pese a que el pico de contagios está lejos de terminar.
Brasil, que ya superó los 1,5 millones de infectados; Perú, Chile y México, que se acercan al umbral de los 300 mil, son los más castigados por el coronavirus en cuatro meses de reportado el primer caso en sus territorios.
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Tanto así, que Perú, que tiene la mitad de la población de Italia (unos 30 millones de habitantes), desde mediados de junio ya sobrepasaba en número de casos a este país que fue epicentro de la pandemia en Europa en marzo. Y su vecino Chile está adelante del Reino Unido en cifra de infectados.
En tanto, México ya se sitúa en el sexto lugar en muertes, supera España con cerca de 29.843 (hasta ayer) y muy cerca de igualar a Francia en dicha estadística.
Si bien la alta incidencia del virus en estos países varía de acuerdo con la diversidad social y geográfica, así como las curvas epidemiológicas, hay ciertos elementos comunes.
En primer lugar, María Fernanda Gutiérrez, viróloga y doctora en Ciencias Biológicas de la Pontificia Universidad Javeriana, subraya que el virus se está comportando como se comportaría en cualquier pandemia.
Es decir, a medida que se infectan las personas, aumentan los niveles de contagio, ese es el comportamiento natural, describe.
Entonces, eso explica, a juicio de la experta, los niveles de infección en el mundo, especialmente en países donde el virus entró como en América. A todas luces, no estamos frente a un “problema viral, sino un problema social”, insiste la viróloga.
Hay países que lo han dejado pasar o minimizado la pandemia; otros han tomado decisiones como Colombia de hacer confinamientos, unos más radicales que otros, asegura Gutiérrez.
La clave está en cómo manejan los países el confinamiento, y el control de lograr que haya una disciplina y que la gente tome las medidas de bioseguridad, agrega.
Igualmente destaca otro punto importante: la capacidad que tiene el país de hacer pruebas para hacer cercos epidemiológicos y controlar la infección.
Al respecto, Álvaro Idrovo, epidemiólogo y profesor del Departamento de Salud Pública de la Universidad Industrial de Santander, observa que México, Perú y Chile, son dos escenarios diferentes.
En ese sentido, explica que el camino que muestran Chile y Perú es similar al de Colombia, que contrasta con el de México, que es un contexto donde no hubo un confinamiento definitivo a diferencia de los tres primeros.
Además, Idrovo hace una distinción en cuanto a la población en México y en especial, la superpoblación de su capital, un caldo de cultivo para que se propague muy rápido la enfermedad y que también se está focalizando en pacientes más graves.
En cuanto a Perú, el epidemiólogo lo atribuye a la informalidad del país, de allí sus efectos con tasas muy altas de contagio y también de mortalidad, pese al confinamiento que adoptó.
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Periodista de Vanguardia desde 1996. Egresada de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Editora de la sección de Tendencias y Vanguardia Kids. Editora nocturna.
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