Al cierre de la controvertida invitación pública liderada por el Hospital Universitario de Santander, HUS, para terminar la construcción de la Central de Urgencias de la institución, contrato por valor de 2.543 millones, tan solo un oferente presentó su propuesta.
Según el acta de cierre, Compuser SAS, representada legalmente por Henry Buriticá, fue la única empresa que se presentó como interesada en participar en la invitación pública del Hospital Universitario, con una oferta económica de $2.523 millones, $20 millones menos que el valor oficial de la convocatoria del HUS $2.543 millones.
Para Rodrigo Fernández, expresidente de la Sociedad Santandereana de Ingenieros, SSI, las limitaciones en los tiempos del cronograma, convocatoria, solicitud de requisitos extremadamente específicos y la exigencia de créditos millonarios en menos de 15 días, efectivamente terminaron afectando la pluralidad de oferentes en el proceso contractual. “Al cierre del proceso ocurrió lo que estaba previsto único oferente. Las advertencias no se escucharon y solo se pudo presentar el ungido. Su oferta por $2.523 millones podría inducir a creer que se lo oferente tenía cierta idea que no habría competencia y por ello solo ofreció $20,3 millones menos que el presupuesto oficial. La clave para espantar los oferentes los código 39121000 que no lo tiene nadie, el cronograma y el cupo de crédito”, indicó Fernández. Y es que a pesar de las observaciones de los veedores, el pasado 21 de diciembre, las directivas del HUS decidieron mantener en firme todos los requisitos habilitantes del proceso.
“Nada irregular”
Frente a las críticas a este proceso, el gerente del HUS, Julián Niño, ha insitido en que no hay nada irregular. “El proceso está ajustado a los tiempos que tiene contemplado nuestro manual de contratación. Sobre el tema del crédito es un respaldo que busca el hospital para que el contratista que gane sí tenga la robustez financiera necesaria para desarrollar un proyecto de gran envergadura como lo es la terminación de la Central de Urgencia, que, aunque es solo el 30% del faltante de la obra, es la parte más compleja de todo el proyecto”, señaló NIño.