En la más reciente jornada electoral, algunos congresistas santandereanos aumentaron su caudal electoral, mientras que otros lo perdieron. Vanguardia presenta en cifras cómo les fue a los candidatos de la región.
En las elecciones legislativas del pasado domingo, varios santandereanos buscaron la reelección en el Congreso de la República, mientras que otros intentaron una vez más pasar el umbral para 'coronar' una curul en Capitolio Nacional.
Algunos aumentaron su votación considerablemente, otros no fueron capaces de llegar a la meta y uno perdió su caudal electoral lo que le significó quedarse sin el escaño en la Cámara de Representantes.
Vanguardia presenta en cifras cómo les fue a los candidatos de Santander que intentaron una vez más entrar al Congreso.
Aumentaron el caudal electoral
En los comicios del pasado domingo 803.872 votos fueron validados para la Cámara de Representantes en Santander, mientras que para Senado la cifra estuvo sobre los 16.278.961 sufragios.
En las elecciones de 2018, el senador Miguel Ángel Pinto, del Partido Liberal, alcanzó 84.068 votos, quedándose con una de las 14 curules que obtuvo el partido rojo.
El pasado domingo, Pinto sacó 110.068 sufragios, es decir, 26 mil votos más que hace cuatro años. El senador fue uno de los congresistas que aseguraron curul en el Congreso.
Algo similar ocurrió con Jaime Durán, quien en las elecciones pasadas tuvo 69.487 votos y este año alcanzó 88.117, aumentando su potencial en la no despreciable cifra de 18 mil personas.
En la Cámara, con aumentos y pérdidas
Un panorama similar ocurrió en los aspirantes a la Cámara de Representantes por Santander.
Ciro Fernández, el congresista que en 2018 alcanzó 23.646 votos dentro del Partido Cambio Radical, en esta oportunidad solo obtuvo 16.690, perdiendo así su curul en el Congreso de la República. La pérdida de Fernández fue de casi 7 mil sufragios.
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Liliana Botero de Cote, viuda del exalcalde de Barrancabermeja, Edgar Cote Gravino, quien murió en un accidente aéreo, tampoco pudo entrar a la Cámara en esta oportunidad.
La hoy excandidata en 2018 tuvo 17.678 votos, 132 menos que Edwin Ballesteros, quien sí pudo entrar al Congreso, pero que renunció por evadir a la Corte Suprema de Justicia que lo investigaba por presuntos hechos de corrupción mientras fue gerente de la Esant.
En esta oportunidad Botero de Cote solo tuvo 6.243 votos en una lista del Centro Democrático.
A quién sí le aumentó significativamente el caudal electoral fue al representante Óscar Villamizar, quien hace cuatro años tuvo 37.068 votos, pero para este cuatrenio se eligió con la cómoda cifra de 51.598 sufragios, teniendo la segunda mayor votación en Santander.
Los que buscaron reelección en 'cuerpo ajeno'
Las investigaciones que adelantan las autoridades judiciales hicieron que dos congresistas de la región renunciaran a sus curules en el Congreso para evadir a la Corte Suprema de Justicia.
En julio de 2021, luego de que el CTI de la Fiscalía capturara al entonces senador Richard Aguilar Villa por presuntos hechos de corrupción mientras fue gobernador de Santander, el congresista renunció a su curul y Cambio Radical tuvo 'silla vacía' en el Congreso.
Aunque Aguilar Villa continúa privado de la libertad y no pudo aspirar a la reelección, su familia movió la maquinaria para poder recuperar el escaño.
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Hace cuatro años el exsenador puso 76.942 votos. La que sería cuota del Clan Aguilar, José Alfredo Marín, del Partido Conservador, heredó casi la totalidad de esa votación, pues en esta oportunidad alcanzó curul en la Cámara alta con 78.447 sufragios.
Pero este no es el único caso. Edwin Ballesteros renunció en ese mismo año a su escaño en la Cámara de Representantes por hechos similares que habría ocurrido durante la misma administración mientras él era gerente de la Empresa de Servicios Públicos de Santander, Esant.
Ballesteros se eligió con 17.810 votos y tras su renuncia, quiso poner a su esposa Johanna González como heredera de su caudal electoral, pero las cuentas no les alcanzaron, pues González solo puso 10.719 votos.
