Con esta nueva patente otorgada a la UIS se espera hacer más competitiva la industria de aceites esenciales en el país y a la vez, beneficiar a los sectores cosmético, alimentos y de productos de aseo personal, los cuales demandan alternativas naturales.
Investigadores del Centro de Investigación de Excelencia Cenivam, de la Universidad Industrial de Santander, crearon un nuevo método que busca facilitar la obtención de geraniol de alta pureza a partir del aceite esencial de la planta aromática conocida como palmarrosa.
Este proceso que beneficiará directamente a los productores de aceites esenciales de la región y el país, fue recientemente patentado por la Superintendencia de Industria y Comercio.
Fue liderado por los profesores doctores, Elena Stashenko y Jairo René Martínez Morales, e hizo parte de las actividades de formación del Magíster en Ingeniería Química, Andrés Fernando Ramírez Quintero, y el Doctor en Química, Diego Camilo Durán García.
Sobre la investigación
El gerianol es un alcohol incoloro, reconocido por su agradable fragancia a rosas, y empleado comúnmente en perfumería, productos cosméticos y de aseo personal. Según los investigadores UIS, el gerianol es junto al citronelol y el linalol, uno de los alcoholes terpénicos comercialmente más importantes y su producción anual asciende aproximadamente a 1000 toneladas al año.
“Precisamente, una de las principales motivaciones en el desarrollo de este invento fue generar un mayor valor al aceite esencial de palmarrosa desde la destilación primaria, en donde participa directamente el productor”, comentaron sus creadores.
Estas investigaciones realizadas en el Cenivam sobre los procesos de obtención de aceites esenciales, han mostrado que, para ser competitivos en el mercado global, es necesario generar valor agregado en los ingredientes naturales que se obtengan de las plantas aromáticas.
“Con la obtención de un producto comercial de alta pureza, es posible mejorar los precios del aceite esencial de palmarrosa, lo cual repercute en mejores ingresos para los productores”, comentaron sus creadores.
Una investigación social que enriquece el conocimiento
Desde el ámbito social, la patente permitirá fortalecer las asociaciones de productores de plantas aromáticas, así como trabajadores agrícolas, cultivadores, transportadores, industriales y comerciantes.
Por su parte la comunidad científica también se beneficia con la generación de conocimiento en los procesos de transformación catalítica de productos naturales y en las bases tecnológicas de la cadena de valor de los aceites esenciales.
“Esta patente es una vez más un reconocimiento al trabajo científico y tecnológico que se realiza en la UIS, y a su proyección social de trabajo colaborativo con comunidades campesinas, principalmente en Santander. Es el respaldo de que trabajamos con ideas novedosas que responden a las necesidades latentes de sectores industriales y que pueden generan valor económico en la sociedad”, finalizaron los investigadores.