La Selección Colombia cumple el segundo peor inicio en las Eliminatorias Sudamericanas desde que se juega bajo el formato de todos contra todos en 1998. Con cuatro unidades únicamente y una diferencia de goles de -5, el elenco nacional solo supera la actuación hacia el Mundial de Alemania 2006, donde luego de cuatro juegos acumuló un punto.
En el fútbol se puede perder, pero hay maneras de hacerlo. La Selección Colombia, en sus últimos dos partidos por la Eliminatoria Sudamericana dejó una pobre imagen que sin duda hace temblar el puesto del entrenador portugués Carlos Queiroz.
La realidad es que no se puede jugar más mal, pero en el fútbol a la hora de pagar los platos rotos siempre la responsabilidad recae sobre los entrenadores, a pesar de que en esta oportunidad también los jugadores tienen mucho que ver con la mala actuación, empezando por la actitud.
Sorprende que futbolistas que se destacan en sus clubes en el balompié internacional, en la Selección mostraran un flojo rendimiento.
Y también genera dudas que una Selección que había realizado buenas actuaciones, en Copa América, en juegos amistosos y en el inicio de la Eliminatoria, repita dos desastrosas presentaciones.
De la noche a la mañana, el equipo tricolor pasó de soñar con una cómoda clasificación a la incertidumbre de la eliminación.
Demasiados errores
Frente a Uruguay y Ecuador (3-0 y 6-1), el combinado nacional recibió nueve tantos y únicamente marcó uno. Cifras que evidencian serios problemas en el bloque defensivo, incapaz de contener los ataques de los rivales.
Además, a la hora de pasar al frente, careció de elaboración, con malas entregas, sin profundidad y sorpresa.
De caer en Barranquilla contra Ecuador, el DT nacional decidió realizar modificaciones de nombres, pero no movió el planteamiento. La línea de tres mediocampistas internos, conformada por Cuadrado, Lerma y Uribe, no tuvo ningún filtro y los defensores se vieron expuestos.
Así mismo, el sector ofensivo falló a la hora de generar fútbol y sin el balón y con debilidades en marca, todo fue más cómodo para un Ecuador que presionó, fue dinámico y efectivo.
Los errores saltan a la vista: líneas muy separadas, defensa lenta, pésima entrega de balón, descuido en las marcar y cero volumen ofensivo.
A Queiroz no se le observa claridad en el planteamiento. Intenta afianzar el módulo 4-3-3 para ser más vertical, al estilo europeo, pero su equipo parece que perdió la memoria y ahora no consigue entender el mensaje.
Obligado a reaccionar
Después de cuatro fechas a las Eliminatorias al Mundial de Catar 2022 el panorama es oscuro para una escuadra que cuenta con jugadores en los principales clubes del mundo, que además cuentan con experiencia en Mundiales, pero que afronta un difícil momento deportivo, que se debe superar pronto.
Hace cuatro años, a esta altura, Colombia también sumaba cuatro puntos luego de cuatro jornadas y logró enderezar el rumbo para clasificar a Rusia 2018.
Material humano sin duda hay, pero se deben corregir aspectos al interior del plantel para lograr la remontada.
En las próximas dos jornadas, Colombia recibe a Brasil y visita a Paraguay, en dos juegos con poco margen de error de cara al objetivo de volver, por tercera vez consecutiva, al Mundial.
