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Bucaramanga
Domingo 09 de mayo de 2021 - 12:00 PM

Alistan planes de contingencia para manejo de cadáveres

El sector de funerarias y parques cementerios dice que aún no hay riesgo de colapso, pese al aumento de demanda. La Gobernación de Santander busca articular lo que sería la ampliación de la capacidad instalada.

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En Santander existen siete hornos crematorios, entre públicos y privados, de los cuales cuatro se encuentran en el área metropolitana. (Foto: Archivo / VANGUARDIA)
En Santander existen siete hornos crematorios, entre públicos y privados, de los cuales cuatro se encuentran en el área metropolitana. (Foto: Archivo / VANGUARDIA)

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En Santander existen siete hornos crematorios, entre públicos y privados, de los cuales cuatro se encuentran en el área metropolitana. (Foto: Archivo / VANGUARDIA)

La Secretaría de Salud de Santander sugirió la articulación entre alcaldías del área metropolitana de Bucaramanga, funerarias y parques cementerios, para la implementación de los planes de contingencia sobre el manejo y disposición de cadáveres por COVD-19.

Lo anterior, en consecuencia, al comportamiento actual de la emergencia sanitaria causada por el SARS-CoV-2 y el posible aumento de muertes que pueden exceder los estándares normales de la operación.

En Santander, del 1 al 9 de mayo, han muerto 158 personas por el virus, cifra que no incluye a aquellos que fallecieron esperando el diagnóstico confirmatorio y que, por protocolos, debe ser manejado, trasladado y dispuesto de igual manera que un positivo.

Dentro de los requerimientos realizados por la Administración Departamental, se solicitó a cada uno de los municipios presentar la información actualizada del diagnóstico de la capacidad de bóvedas y sepulturas disponibles para la inhumación de cadáveres y el estado y capacidad de hornos crematorios.

El propósito es avanzar en la búsqueda de alternativas respecto a la ampliación de la capacidad instalada para la gestión de cadáveres, bajo dos escenarios. Uno es la instalación de depósitos temporales o contenedores refrigerados, morgues de emergencia, para cuando la capacidad hospitalaria, de cementerios y territorial colapse.

Y, el segundo, establecer nuevos sitios de inhumación para cuando se presente saturación y pérdida de capacidad para inhumar en cementerios y suspendan operaciones por problemas técnicos los hornos crematorios en los territorios o la capacidad de los hornos crematorios no alcance para satisfacer la demanda.

De esta manera, se daría cumplimiento a lo establecido por el Ministerio de Salud y Protección Social, en la ‘Guía de Orientaciones para el manejo, transporte y disposición final de cadáveres’; así como en la Circular 078 del 2020 sobre ‘Inhumación y Cremación de cadáveres’ emitida por la Secretaria de Salud de Santander, si dado el caso se llegan a presentar situaciones catastróficas por el COVID-19 que desencadenen en la declaratoria de una calamidad sanitaria por el incremento de fallecidos.

Frente a esto, las autoridades afirman que el anuncio no quiere generar ninguna alarma; pues, en realidad, lo que se busca es adelantarse al peor escenario que puede derivar del tercer pico de la pandemia.

En indagaciones realizadas por Vanguardia, se pudo conocer que la adquisición de contenedores no sería competencia de las funerarias y parques cementerios, sino de cada municipio.

Sin embargo, entre este sector si hay una gran preocupación, pues entre los análisis que han venido haciendo aseguran que el número de fallecidos con respecto al primer trimestre del 2020 incrementó cerca del 43%. De hecho, el indicador de cremación en la ciudad ya superó el 60%, con un incremento cercado al 25% en el último año.

Los hornos, en el área metropolitana, tendrían una capacidad de cremar 40 cadáveres por día. En Barrancabermeja, San Gil y Socorro también cuentan con hornos cuya capacidad, en cada uno, alcanzaría las 10 cremaciones por día.

José Mauricio Martínez Torres, gerente general Parque Jardines Las Colinas, aseguró que, en su caso, si bien no se tiene un represamiento de fallecidos, la demanda de servicios de cremación se ha aumentado considerablemente frente a la prestación que se tuvo en meses como febrero.

“Tenemos un incremento parecido a los niveles del periodo de fin de año (diciembre–enero), pero no tanto como el de agosto de 2020. Esto significa que podemos estar atendiendo seis cremaciones de COVID-19 en el horno y tres lotes (inhumación) de COVID-19 al día, cuando en los meses que no estábamos en pico atendíamos el 60% de eso”, comentó.

Martínez Torres reconoció que para responder de la mejor manera y estar en estos momentos lejos de un colapso se incrementó la contratación de personal y se le hizo un cambio del lavador de gases al horno. Actualmente, se está atendiendo al 95% de la capacidad.

En Parque Jardines Las Colinas, se pueden atender hasta 12 cremaciones diarias, dejando el horno trabajando 24 horas. El proceso inicia luego de que la institución médica le entrega el cuerpo a la funeraria, debidamente desinfectado y en doble bolsa, y la funeraria lo lleva hasta el cementerio donde se hace un proceso de cremación directa.

Allí, de hecho, se cuenta con una nevera donde se llevan a cabo algunas conservaciones, en caso de alcanzarse a cremar el cuerpo de manera inmediata.

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Publicado por Ingrid Paola Albis Pérez

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