La pandemia extendió el hambre a otros 9.592 hogares de Bucaramanga y su área
Los hogares con hambre pasaron de 15 mil a 24 mil en Bucaramanga y su área, según las estadísticas oficiales más recientes. La disminución de las actividades económicas ocasionó un grave impacto en miles de familias, que aún padecen las ‘duras y las maduras’ para lograr sobrevivir.
Aunque muchos trabajadores y comerciantes formales resultaron con perjuicios en sus ingresos, la crisis ‘golpeó’ más duro a quienes viven día a día de la economía informal.
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Como el caso de Julio Martín Pinzón de 54 años de edad, un vendedor ambulante que además afronta una discapacidad física que lo obliga a usar muletas, y quien se vio en la obligación de ‘migrar’ hacia el campo por más de medio año, ya que literalmente se estaba muriendo de hambre en la ciudad.
“Cuando nos impidieron salir a las calles a trabajar me quedé sin qué comer, acá no había cómo, me tocó salir de Bucaramanga e irme para el campo. Unos familiares me acogieron y me dieron tanto comida como posada, porque tampoco tenía con qué pagar un techo”, dijo Pinzón.
El hogar de Julio Martín es unipersonal. Vive solo en el barrio San Miguel, y ya regresó de nuevo a sus ventas callejeras. Señala que en medio de la cuarentena no recibió ayuda del Gobierno Local.
“La Alcaldía se demoró más de siete meses para ayudar a la población con discapacidad en condiciones vulnerables. Hace poco nos comenzaron a entregar las ayudas humanitarias. La situación de la población con discapacidad es bastante preocupante, porque a más del 80% en el área no le brindan posibilidades de trabajo...conozco personas que pasan hasta dos días con una sola comida, porque ni siquiera reciben apoyo de familiares”, dijo este miembro de los comités Municipal y Departamental de Discapacidad.
“Perdimos un negocio de más de ocho años”
El Dane aplicó una encuesta a los ciudadanos para obtener información sobre la situación social y las condiciones de vida en el país, y compiló datos acumulados de agosto, septiembre y octubre de 2020.
Los resultados arrojados indican que, antes de la pandemia en Bucaramanga y su área 15 mil 354 hogares comían menos de dos veces al día. Tras el aislamiento obligatorio, dicho indicador se elevó hasta los 24 mil 946 hogares.
En muchas familias la cantidad de ingresos se redujo considerablemente debido a la pérdida de empleos y al cierre de negocios o unidades productivas.
Solamente en Bucaramanga, “en el 68% de los hogares algún miembro perdió su empleo”, precisó el Alcalde Juan Carlos Cárdenas.
Muchos núcleos familiares que contaban con múltiples ingresos, hoy se sostienen solamente con el producido de uno de sus miembros.
Un ejemplo de esta difícil situación es el hogar de Socorro Henao, quien junto a su esposo dirigían una lonchería en el Centro de la capital santandereana. La cuarentena impuesta provocó el cierre del negocio por el cual trabajaron con esmero durante años.
“No pudimos reactivarnos. Se acumularon los servicios y el arriendo, además teníamos que invertir para las adecuaciones exigidas por protocolo. En más de ocho años que tuvimos el negocio fue la peor crisis. Desde que inició la pandemia nos quedamos sin ingresos, sobrevivimos gracias a un hijo que nos mantiene”, relató Henao.
Se calcula que en el área metropolitana 344 mil 142 personas viven en condiciones de pobreza monetaria. Según el Dane, aquel ciudadano que gana menos de $447 mil mensuales se considera pobre.
Luego de la encuesta que se llevó a cabo, el Dane reveló que en Bucaramanga y su área 140 mil 225 personas han recibido ayudas durante la pandemia, por parte de entidades públicas y privadas, como subsidios para alimentación y arriendo, mercados, entre otras.
La segunda con menos hambre
A pesar de la preocupante cantidad de personas que sufre escasez de alimentos en Bucaramanga y su área, es preciso informar que la ciudad registra uno de los menores índices de hambre en el país.
Tunja es el municipio con menos hambre. Según el Dane, se calcula que el 96% de los tunjanos come al menos tres veces al día. En segundo lugar aparece la capital santandereana y su área, cuyo indicador es del 92,6%.
En contraste, la ciudad con más hambre es Cartagena. Se estima que solo el 39,5% de los cartageneros se alimenta tres veces diariamente.
En Medellín, por ejemplo, el 77,4% de la población come tres veces al día, en Cali este índice es de 73,8% y en Bogotá de 71,5%.
Dato: Solamente en las 23 ciudades más importantes de Colombia, se calcula que 2 millones 321 mil 533 personas comen menos de tres veces al día.
Periodista egresado de la Universidad Pontificia Bolivariana. Miembro del equipo de Área Metro en la versión impresa de Vanguardia desde 2016, y apoyo en la elaboración de contenidos digitales y transmisiones en directo.
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