Utilizando armas de fuego, tres delincuentes despojaron de sus pertenecías a los 15 pasajeros y el conductor de una buseta. El hurto ocurrió ayer en la Prolongación de la calle 45, Bucaramanga.
Momentos de pánico vivieron los pasajeros y el conductor de una buseta de servicio público, afiliada a la empresa Unitransa, luego de que tres hombres cometieron un atraco masivo.
Este hecho de inseguridad ocurrió aproximadamente a las 9:00 de la mañana de ayer, en momentos en que el vehículo, de placas XMA-308 y que cubría la ruta Poblado - Campohermoso - Carrera 33, se desplazaba por la Prolongación de la calle 45, en inmediaciones a la Cárcel de Mujeres de Chimitá.
Pedro Oróstegui, gerente de Unitransa, indicó a Vanguardia que los asaltantes ingresaron al transporte colectivo cuando el conductor se detuvo a dejar una pasajera.
“Los tres tipos se subieron sin permiso por la puerta de atrás... Le gritaron al chofer que los llevara por $1.000, pero él les dijo que no, que se bajaran. Ellos no hicieron caso y le respondieron que ya le pagaban”, dijo el vocero de la empresa.
Uno de los delincuentes se quedó en la parte trasera del bus, otro en la mitad y el tercero se acomodó detrás del asiento del conductor.
Tan solo el vehículo alcanzó a recorrer unos metros cuando el hombre que estaba detrás del transportador, sacó un revólver y procedió a iniciar el robo masivo.
“La buseta tiene una cabina para aislar al conductor, pero hay un pequeño espacio por donde él recibe el dinero. Por ahí le metieron el arma y se la colocaron en la cabeza”, agregó el gerente.
Tras las intimidaciones, a la víctima no le quedó otra opción que entregar $150 mil en efectivo del producido del día.
Además de asaltar al chofer, los otros dos ladrones, quienes se habían ubicado estratégicamente en otras partes del vehículo, procedieron a hacer lo mismo con los 15 pasajeros que llevaba la ruta.
“Les quitaron los bolsos, el dinero, los celulares... Todo. A uno de los pasajeros le pegaron con la cacha del revólver porque no quería entregar su teléfono”, agregó Oróstegui.
Ya con el botín en sus manos, cuyo monto exacto se desconoce, los tres criminales se bajaron de la buseta, saltaron una malla y se dieron a la fuga por zona boscosa.
Testigos relataron que un guardia del Inpec alcanzó a interceptar a uno de los señalados responsables, sin embargo, tras un forcejeo logró escapar.
Hubo una captura
Una vez fue reportado el atraco masivo, la Policía hizo presencia en el lugar y activó un fuerte operativo para dar con los responsables.
Fue así que gracias a la información aportada por la comunidad, en el barrio Rincón de La Paz, cerca del lugar de los hechos, fue capturado uno de los presuntos responsables.
El sospechoso quedó a disposición de la URI de la Fiscalía y hoy será presentado ante un Juez de Garantías.
Testigos indicaron que los asaltantes tenían acento venezolano. Aún las autoridades no han revelado identidades, ni nacionalidades de los acusados.
“No es la primera vez que ocurre algo así, van como tres o cuatro asaltos a buses. Roban y se escapan para el mismo lugar, Rincón de La Paz o el barrio Galán”, relató un testigo del caso.
