Como una excelente estudiante, que soñaba en un futuro convertirse en abogada o una líder política, era recordada ayer por sus familiares en las instalaciones de la morgue de Medicina Legal, seccional Bucaramanga, la joven de 15 años que murió tras ser alcanzada por una bala perdida en el municipio de Floridablanca.

Este hecho de violencia, que cobró la vida de una persona inocente, se empezó a tejer sobre las 7:45 de la noche del pasado jueves, en momentos en que la adolescente salió de su vivienda, localizada en la calle 5A con carrera 3 del barrio Villa Helena Sur, con el propósito de hablar con una amiga.

Jairo Serrano Suárez, padrastro de la menor fallecida, relató a Vanguardia Liberal que esta joven caminó unos pocos metros y se sentó en unas escaleras que conducen a la cancha de fútbol del sector.

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“Ella había estado toda la tarde con su mamá haciendo las tareas del día siguiente, por lo que decidió salir a mostrarle a una amiga un video del reguetonero (Legarda) muerto en Medellín”, explicó el familiar.

Justo cuando las jóvenes observaban el video de este cantante y youtuber, quien paradójicamente había sido asesinado horas antes por una bala perdida en medio de un fleteo, sucedió la tragedia.

La bala perdida

Serrano Suárez informó que alrededor de las 8:05 de la noche los vecinos vieron correr a un joven del barrio conocido como ‘El Negro’, quien, por entre las estrechas calles peatonales del barrio, era perseguido por un grupo de hombres; uno de ellos estaba armado.

En medio de la persecución, en dos oportunidades este pistolero accionó su arma de fuego, sin embargo, no logró impactar a ‘El Negro’. Contrario a esto, el segundo tiro impactó en la humanidad de la menor de 15 años.

“El pelado que venían persiguiendo dobló hacia la derecha, pero la bala siguió de largo hasta que impactó a la niña, que estaba ahí en las escaleras. Ella tenía el celular en las manos, la bala lo traspasó, luego pasó derecho y la hirió en el pecho. La amiga que estaba con ella pensó que el celular se había estallado, pero luego la vio caer”, recordó Jairo acongojado.

Tras escuchar los disparos, los familiares de la adolescente salieron y, al percatarse de la situación, procedieron a auxiliarla.

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“Con ayuda del hermano y de una muchacha la subimos a una camioneta y la llevamos a la Clínica Foscal, a donde llegó muerta. En el trayecto ella me agarraba la mano, me quería decir algo. No es justo que siempre en estas cosas resultan pagando las personas inocentes”, agregó el padrastro.

La víctima cursaba décimo grado en el Colegio El Carmen y el pasado 7 de enero había cumplido sus 15 años.

“Yo vi al asesino”

El padrastro afirmó que cuando salió de su vivienda alcanzó a observar al hombre que le quitó la vida a su hijastra.

“Era un tipo de unos 45 a 50 años, de contextura y estatura media. Llevaba un bolso terciado y vestía una bermuda rosada. Le vi la cara, tenía como bozo. Pensé que eran las autoridades en un procedimiento de captura”, concluyó el hombre, quien ahora espera que la Policía y Fiscalía den con el paradero de este sujeto.