Durante todo el mes de diciembre, Tokio es un festival de luz, no hay calle sin sus luces, sin su armónica decoración para celebrar el Oshogatsu, el Año Nuevo Japonés.
Las calles de Tokio, la capital japonesa, fueron adornadas como cada diciembre con decorativos a la época navideña.
Tokio, de unos 14 millones de habitantes, atrae porque es una ciudad tan única como espectacular, en ella confluye la historia de una nación oriental y milenario y la modernidad más vanguardista y es que es la ciudad más representativa de la diversidad del país nipón, el país de las geishas y el de la tecnología.
La espectacularidad de la iluminación navideña de Tokio se explica no solo por las clásicas luces que brillan a lo largo y ancho de la ciudad sino por los espectáculos lumínicos que se desarrollan en estos días, espectáculos, que cuentan alrededor de seis millones de bombillas.
Además se puede disfrutar de esa iluminación desde algunas de las atracciones de este parque, o el de la Torre Tokyo SkyTree que enciende más de medio millón de luces iluminándose como un árbol de Navidad.