Luis Miguel Delgado Grande, compositor santandereano, estrenará tres obras en festivales internacionales
¿Quién podría decir dónde radica la chispa, el impulso, la semilla que promueve la creación de una gran idea que logra transformarse en sonidos que, una vez interpretados, cautiven a quienes escuchan una melodía?
Lógicamente, esta pregunta solo podría responderla alguien a quien esa chispa le ha llevado a estrenar próximamente tres de sus obras en festivales internacionales para jóvenes compositores, si bien de manera virtual, con todo el rigor de estos prestigiosos eventos: el compositor santandereano Luis Miguel Delgado Grande.
“Es algo que no digo yo, sino que me lo inculcaron mis maestros: no puede existir una estética sin un pensamiento técnico y, al mismo tiempo, la técnica se alimenta del planteamiento estético que obliga a desarrollar una técnica y a esto lo que se le agrega siempre una idea provocadora, la idea que hace esta chispa que tiene que ver con la idea de traducir un fenómeno que es extra musical a lo musical”.
Por ejemplo, su obra “Transfecciones II”, que se estrena este 24 de julio en Ticino, Suiza, en el Ticino Musica Festival, en el marco del 4th International Young Composers Academy, explora la idea de llevar un tema médico a la música.
“Es una idea como la alegoría a una infección que va causando una transformación, en este caso, en la obra, y esta infección es como una célula que se va impregnando en diferentes voces del cuarteto”.
El festival va de la mano con jornadas académicas y ambos se trasmitirán vía “streaming”, a través de las redes sociales y la página oficial del evento.
Las obras
Además, de “Transfecciones II”, que será interpretada por el Cuarteto Diotima, de Francia, Delgado Grande también estrenará otras dos obras: “Chantá Phawaripum”, una obra para ensamble de cámara en 5 de septiembre, en el Teatro Mayor Bogotá y “Tiempo Cero”, también para ensamble de cámara, el 18 diciembre en Bangkok, Tailandia.
“Chantá Phawaripum” será estrenada por el Ensamble la Sociedad, de Colombia, en el concierto programado por Círculo Colombiano de Música Contemporánea y es una obra inspirada en esta frase quechua que traduce: “De repente sale volando”.
“La idea del lenguaje, la idea de la traducción, la idea de llegar a una triple traducción en la música me hace imaginarme y plantearme ideas estructurales de la música, investigar un poco sobre la relación del vuelo y las alegorías del vuelo y cómo puedo representar esto con el ensamble que en este caso es un quinteto tipo Pierrot”, explica Delgado Grande.
El quinteto Pierrot se convirtió en el conjunto del núcleo para muchos conjuntos de música contemporánea y está compuesto por cinco instrumentos: flauta, clarinete, violín, violonchelo y piano, al que se le agrega también percusión.
Por su parte, “Tiempo Cero” será estrenada por Tacet(i) Ensemble, de Tailandia, en el marco del Thailand new Music and Arts Symposium, es una obra que Delgado Grande escribió desde el año pasado en la residencia artística Germinaciones, en Santiago de Chile. Esta residencia fue apoyada por Ibermúsicas, que ofrece estímulos para proyectos de composición a jóvenes músicos.
“En el caso de “Tiempo Cero”, por ejemplo, pues hay una idea que tiene que ver con la sensación interna del tiempo y es algo que me interesa: pensar que el tiempo no es algo que todos percibimos de la misma forma, no solo los seres humanos, sino los seres vivos. Me genera unas ideas de cómo puedo representar cosas que son grandes en un espacio muy pequeño de tiempo y de la forma contraria”, señala Delgado Grande.
“Tiempo Cero” también se estrenará en Santiago de Chile, en septiembre de este año, aunque la fecha está por definir.
Además de estas obras, “Estudio de la luz” también será estrenada en San Francisco, Estados Unidos, en septiembre, por el Megalópolis Saxophone Orchestra y el Mana quartetcon, con una fecha aún por definir.
Así mismo, para 2021, Delgado Grande espera estrenar “Ãtman”, una obra para ensamble en el Festival de música Atemporánea, de Buenos Aires Argentina e “In Vitro”, una obra elecroacústica para soporte fijo que se estrenaría en el evento Muslab, Concierto de Música Electroacústica, en Francia / Cesaire, del Conservatorio Reims, con fecha aún por definir.
Sobre el compositor
Luis Miguel Delgado Grande tiene 29 años. Dice que no tiene esa “vena musical” en su familia, pero desde niño estuvo relacionado con la Dirección de Cultura Artística de Santander, Dicas, que cerró en el 2000.
“Ahí empezó este amor por el arte. Sin embargo, no me decidí a estudiar música hasta ya adolescente, casi adulto, cuando entré a la UIS e hice mi licenciatura en música. Allí tuve la oportunidad de conocer al maestro Blas Emilio Aterhortúa, con quien tuve una cercanía muy amena, muy chévere de estudiante-alumno. Fueron momentos muy interesantes: el amor por la creación, la composición. Más allá del amor por la música que lógicamente existe, la idea de crear, construir algo, hacer sonar algo que en una primera instancia estuvo solo en mi imaginación, en mi cabeza”, explica Delgado Grande.
Una vez terminó su pregrado, el compositor santandereano viajó a Madrid para estudiar su maestría en el Centro Superior Katarina Gurska, adscrito al Real Conservatorio Superior de Música de Madrid.
Su intención era estudiar con los músicos Alberto Posadas, galardonado con el Premio Nacional de Música de 2011 y José Luis Torá, reconocido también en el ámbito de la composición.
Delgado ha participado como compositor en varios eventos como el Festival Distat Terra para jóvenes compositores, en Argentina, en 2016; el Festival “Mixtur”, en Barcelona, en 2017, en el VI Festival Internacional de Nueva Música de San Petersburg, el año pasado y sus obras han sido programadas y encargadas en Boston, Chicago, Barcelona, Belgrado, Madrid, Moscú, Asunción, Bogotá y la ciudad de México.
“La vida del compositor se basa en una formación continua, en estar siempre en contacto con otros compositores, estar al día. Somos una inmensa minoría porque los compositores de música contemporánea somos muy unidos y estamos en una constante formación”, concluye el compositor.
Y agrega sobre la inspiración: “la idea de la inspiración o el imaginario que tiene la gente de la inspiración existe, pero más allá de este impulso también hay una conclusión. Muchas veces lo que uno hace es llenarse de la necesidad de construir algo, como una suerte de un arquitecto, que tiene una idea y que, para lograrla, necesita una preparación técnica, ya que sin ella puede imaginar un edificio mágico, pero no se va a levantar”.
Comunicadora social - periodista egresada de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Desde 2005 hace parte del equipo de Vanguardia, trabajando en crónicas y reportajes premium, los cuales se enfocan en temáticas culturales, población Lgbt, y mujer y género.
Ganadora de un premio Luis Enrique Figueroa en 2007 con ‘Aquí estamos pintados’ y un premio CPB con ‘Diario de una bulimica’ en 2008.
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