Uno de los capturados era auxiliar de la Policía y estaba a la espera de recibir la libreta militar
Un taxista, quien llevaba al joven, paró al vehículo de emergencias que se movilizaba desde San Gil a Bucaramanga y le solicitó los servicios para llevarlo a un centro asistencial, después que al muchacho moribundo lo montaran a su automotor vecinos del barrio Los Cisnes.
Los paramédicos lo revisaron y notaron que tenía una grave herida en la cabeza. De inmediato lo remitieron a un centro médico porque su pulso se debilitaba.
Al llegar a urgencias de la Clínica de Piedecuesta e ingresar a la sala de urgencias, ya no tenía signos vitales.
Aunque de manera inicial se pensaba que lo de Kevin era un accidente en carretera, quizá que se haya caído de una tractomula, testigos de los hechos y la Policía han esclarecido lo sucedido.
En la noche del sábado, el joven se encontraba en una calle del barrio Los Cisnes, del municipio ‘garrotero’. Allí se encontró con dos vigilantes informales con quienes sostuvo una discusión y después una riña.
“Esos manes de negro se la tenían montada al ‘chino’, tenían problemas desde hace rato. Dicen que vendía drogas en la cuadra, pero lo cierto es que le dieron duro”, señaló un habitante.
Un video de una cámara de seguridad muestra el momento donde dos hombres con overoles negros lo persiguen para golpearlo con sus ‘bolillos’, puños y patadas.
También una persona presente en el lugar muestra los momentos posteriores de la agresión. En las imágenes se les ve revisar el cuerpo mientras algunos residentes les reclaman por la fuerte ‘paliza’ y otros los apoyan.
“Ustedes no son autoridad para maltratar a la gente, por qué le pegaron así, no es justo dos contra uno, mataron a ese pelado”, se escucha en la grabación.
Al verlo agonizante en un andén, dos residentes del lugar deciden montarlo en un taxi y recomendarle al conductor que lo llevara a un centro médico. Al salir a la autopista, el taxista se encuentra con la ambulancia.
Después de su fallecimiento, el CTI de la Fiscalía realizó el levantamiento en la clínica. Permanecía sin identificar, pero sus familiares que llegaron a Medicina Legal lo reconocieron.
Una vez se recopiló la información sobre las posibles causas de su deceso, la Policía de Piedecuesta desplegó un operativo para dar con los presuntos responsables del homicidio.
Se trata de dos vigilantes informales, uno de ellos de 40 años natural de Barrancabermeja. Y el otro un auxiliar de Policía de 20, que está a la espera de recibir la libreta militar, pero había empezado a laborar en este oficio cuidando el parqueadero del barrio Portal del Valle.
Al ser requeridos por los uniformados los sujetos aceptaron que golpearon a Kevin hasta dejarlo inconsciente, así lo señaló el informe policial.
Los dos hombres señalados de las agresiones fueron dejados a disposición de la Fiscalía quien determinará su responsabilidad en los hechos.
En cuanto a la víctima, además se conoció, que presentaba antecedentes por el delito de tráfico de estupefacientes.
Esta habría sido una de las causas de la agresión, ya que según lo manifestado por los implicados, Kevin, presuntamente, fue sorprendido en esta actividad ilícita.
El comandante de la Policía Mebuc, el general José James Roa, confirmó la participación del auxiliar que se encontraba de permiso y a la espera de su licenciamiento de la institución.
“Figura aún como activo, pero sabemos que ya había terminado de prestar el servicio militar. También conocemos que vivía en Piedecuesta y consiguió trabajo en la seguridad informal. Hemos dado todas las pruebas a la Fiscalía para que sea esta entidad la encargada de juzgarlos”, destacó el oficial.
Dentro de las investigaciones también se espera el dictamen de Medicina Legal.
